Observación de microorganismos en el microscopio
Examen en fresco
También conocido como montaje húmedo, es una técnica sencilla que consiste en colocar el material a examinar entre un porta y un cubreobjetos; si se trata de un producto sólido, se realizará previamente una suspensión del mismo en agua destilada o solución salina, estériles. Para la observación se utiliza usualmente el microscopio óptico con el condensador bajo, para lograr el contraste adecuado, y el objetivo seco fuerte (40x). La microscopia de contraste de fases y de campo oscuro facilitan la observación de estructuras con bajo índice de refracción, que pasarían inadvertidas con el microscopio de campo claro; sus indicaciones son muy precisas.
El examen en
fresco se dirige principalmente a la detección de bacterias directamente en las
muestras a cuantificar su concentración, a obtener alguna información sobre su
morfología y, con frecuencia, a determinar la motilidad de una especie aislada.
Las burbujas
de aire producidas por un mal montaje, los artefactos, las deficiencias o
suciedades del portaobjetos y otros pormenores pueden confundir al observador
no experto.
El examen en
fresco puede ayudarse de recursos que facilitan la visualización de ciertos
microorganismos:
-La simple
adición de azul de metileno u otro colorante favorece la diferenciación de los
elementos celulares.
-La
preparación con tinta china (método de Burri) o nigrosina permite la
evidenciación de la cápsula microbiana, como un halo transparente que rodea a
la célula. Se utiliza para el diagnóstico de infección por Cryptococcus.
-El montaje
con potasa al 10% en caliente (agente queratolítico) o con azul de lactofenol
es de gran utilidad para el estudio de estructuras fúndicas, sobre todo de
hongos dermatofitos.
-La
preparación con solución yodada (lugol) es de elección para identificación de
algunas parasitosis intestinales.
Preparación
húmeda: es la forma
más simple de examinar las bacterias y otros microorganismos vivos, y consiste
en la suspensión de un inoculo de cultivo en agua u otro líquido, colocando una
gota de ésta suspensión en un portaobjeto común y cubrirlo con un cubreobjetos.
Preparación
de la gota pendiente:
ésta técnica requiere de un portaobjeto con una concavidad o depresión circular
en su centro (portaobjeto excavado)
Técnica:
1.
Colocar
un anillo delgado de vaselina alrededor de la depresión central.
2.
Depositar
una gota de solución fisiológica en el centro del cubreobjetos y emulsionar en
ella el material a examinar si proviene de un cultivo sólido o utilizar una
gota de cultivo si es líquido.
3.
Invierta
el portaobjeto de manera tal que la excavación central quede encima de la gota
del cubreobjetos.
4.
Presione
el portaobjeto y luego inviértalo con un movimiento rápido. La gota que
contiene el material quedará pendiendo sobre la excavación del portaobjeto.
Con el estudio
de la gota pendiente, se puede conocer la motilidad de los microorganismos, sus
agrupaciones naturales, sus reacciones en presencia de ciertas sustancias
químicas.
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